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Memoria a corto plazo

Última actualización el sábado, 25 de mayo de 2024.

 

Definición:

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La memoria a corto plazo es la capacidad cognitiva que nos permite retener y manipular temporalmente información relevante durante un corto período de tiempo, generalmente de unos pocos segundos a minutos, antes de que se pierda o se transfiera a la memoria a largo plazo. Es fundamental para la realización de tareas cognitivas como la resolución de problemas, la toma de decisiones y el procesamiento del lenguaje.

Memoria a corto plazo: ¿Qué es y cómo funciona?

La memoria a corto plazo es un componente fundamental de la memoria humana que se encarga de retener información de manera temporal, permitiendo su acceso inmediato y su manipulación cognitiva. Se considera que tiene una capacidad limitada y que la información almacenada en ella se mantiene activa solo por un corto período de tiempo, a menos que se realice un proceso de consolidación para transferirla a la memoria a largo plazo.

Características clave de la memoria a corto plazo:

Capacidad limitada: Se estima que la memoria a corto plazo tiene una capacidad de retención de aproximadamente 7 ± 2 elementos, según la conocida "Regla de Miller". Esto significa que somos capaces de mantener activamente en nuestra mente alrededor de 5 a 9 elementos de información al mismo tiempo.

Duración temporal: La información almacenada en la memoria a corto plazo tiende a desaparecer rápidamente si no se refuerza mediante la repetición o la elaboración cognitiva. Se estima que su duración es de unos pocos segundos a varios minutos, aunque este intervalo puede variar según el individuo y el tipo de información.

Procesamiento activo: La memoria a corto plazo no solo almacena información de manera pasiva, sino que también la somete a procesos de manipulación cognitiva, como la organización, la comparación, la integración o la transformación. Estas operaciones permiten no solo mantener la información, sino también utilizarla de forma inmediata para la toma de decisiones, la resolución de problemas o la realización de tareas mentales complejas.

En resumen, la memoria a corto plazo cumple un papel crucial en nuestro funcionamiento cognitivo diario, ayudándonos a mantener y manipular información relevante de forma activa y temporal. Su estudio ha sido central en disciplinas como la Psicología Cognitiva, la Neurociencia Cognitiva y la Inteligencia Artificial, contribuyendo a una mejor comprensión de los procesos mentales implicados en la memoria y el pensamiento.

 

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